EPISTOLARIO DE DÁMASO ALONSO
A JOSÉ MARÍA DE COSSÍO


Boletín de la Real Academia Española
[BRAE · Tomo XCVII · Cuaderno CCCXVI · Julio-Diciembre de 2017]
http://revistas.rae.es/brae/article/view/192

Resumen: El epistolario de Dámaso Alonso a José María de Cossío forma parte del archivo de la Casona de Tudanca (Cantabria) y consta de un total de veintinueve cartas y tarjetas escritas entre 1925 y 1966. Las cartas, en las que aparecen otros amigos como Jorge Guillén, Gerardo Diego y Miguel Artigas, dejan constancia de la devoción de ambos por Góngora, su actividad en la Real Academia Española o la publicación en colecciones como Clásicos Castellanos o Austral, además de diversos datos sobre la vida personal y académica de Alonso, Cossío y otros escritores próximos.

Palabras clave: Historia de la literatura; epistolario; Dámaso Alonso; José María de Cossío.

COLLECTED LETTERS OF DÁMASO ALONSO TO JOSÉ MARÍA DE COSSÍO

Abstract: The collected letters of Dámaso Alonso to José María de Cossío is part of the archive of the Casona de Tudanca Museum (Cantabria) and consists of a total of twenty-nine letters and cards written between 1925 and 1966. The letters, which feature appearances from other friends such as Jorge Guillén, Gerardo Diego and Miguel Artigas, provide evidence of the pair’s devotion to Góngora, their activity at the Real Academia Española, and their publication in collections such as Clásicos Castellanos and Austral, as well as various details about the personal and academic lives of Alonso, Cossío, and other related writers.

Keywords: History of literature; epistolary; Dámaso Alonso; José María de Cossío.


El epistolario de Dámaso Alonso (1898-1990) a José María de Cossío (1893-1977), conservado por este en su Casona de Tudanca (Cantabria), consta de un total de veintinueve unidades documentales, entre cartas y tarjetas. En otoño de 1982 la extraordinaria revista Peña Labra (n.º 45) publicó un encarte parcial de esta interesante serie1. Hasta ahora no se había publicado este epistolario entero, por orden cronológico y anotado2, a pesar de que en los últimos años se han venido dando a la luz conjuntos epistolares específicos de Cossío con Rafael Alberti3, Vicente Aleixandre4, Gerardo Diego5, Jorge Guillén6 y Miguel Hernández7, además de las noticias que aparecen en trabajos sobre Manuel Altolaguirre8, Luis Cernuda9, Federico García Lorca10 o Pedro Salinas y Guillén11. De nuevo se reivindica aquí la figura de José María de Cossío, a la que se han dedicado hasta ahora, a mi juicio, pocos estudios monográficos12. Cuestión complementaria a esta es dilucidar por qué Dámaso Alonso sigue siendo uno de los autores de la Generación del 27 menos atendidos monográficamente por la historiografía reciente, a pesar de su indudable importancia en la vida literaria española desde los años veinte hasta su muerte13.

Las cartas abarcan una amplia cronología, desde 1925 hasta 1966. Las que tienen una fecha segura son un total de 18 y corresponden a 1925 (una carta), 1927 (dos), 1928 (dos), 1931 (dos), 1931 (tres), 1932 (una), 1933 (dos), 1936 (una), 1948 (tres), 1961 (una), 1964 (dos) y 1966 (una). A ellas hay que sumar otras siete en las que no figura la fecha completa, aunque en algunos casos, como se verá, han podido ser situadas en una época concreta gracias a ciertos datos contextuales; corresponderían a los años 1932, 1933, 1943 (dos), 1945, 1946 y 1947. Otras cuatro cartas sin fecha pueden situarse, dada su vaguedad referencial, en diferentes años. Alonso y Cossío se conocieron en Madrid, en el entorno de la Residencia de Estudiantes, aunque seguramente no intimaron hasta mediados de los años veinte. De hecho, la primera carta que se conserva en Tudanca, que acompañaba un artículo, lleva fecha de 24 de julio de 1925 y fue escrita desde Northampton (Inglaterra). La última carta lleva fecha de 15 de febrero de 1966, escrita por Alonso desde Madrid, siendo Cossío por entonces presidente del Ateneo.

Las cartas revelan la gran complicidad amistosa y literaria entre ambos, sin que falten en ellas cariñosos reproches por la falta de noticias o el olvido de promesas sobre diferentes proyectos editoriales o recomendaciones de determinados autores. La relación entre ellos gozó de importantes puntos en común: la devoción redescubridora de Góngora, la colaboración en diversos proyectos editoriales o la participación en la Real Academia Española. Todo ello en el marco, entiendo, de una amistad que duró décadas y que, obviamente, no en todo momento dejó testimonio epistolar. En las cartas no aparece ninguna alusión a la notable participación de Alonso en el cancionero de manuscritos poéticos recopilado por Cossío14; tampoco la activa colaboración de Cossío en sendos homenajes bibliográficos al catedrático15. Testimonios de otros corresponsales permiten cifrar la amistad de Cossío y Alonso y su coincidencia casi diaria en el Madrid de los años cuarenta a sesenta16, así como la intervención mutua recomendando la publicación de algunos escritores17.

En las cartas que aquí publico se tratan, no obstante, temas de notable interés para la historia literaria española del último siglo. Alonso llama a Cossío «compañero en Góngora» (carta ii), expresión que viene a resumir los anhelos reivindicativos de un grupo de intelectuales en torno a la fértil obra del poeta barroco, plasmada en las ediciones de sus Soledades por el propio Alonso (ii) y de los Romances por Cossío (iii). A los inicios poéticos de Alonso (i) se unen sus consultas lexicográficas o literarias a Cossío (iv, ix, x) y el interés con el que recibe y reseña sus libros, como los poemas de Lista, Polo de Medina y Los toros en la poesía castellana (v, vi, vii). Además, las cartas informan de datos personales de Alonso, sobre su novia Eulalia (v) o su cuñada María (x), así como su actividad docente en Inglaterra (xii) y Estados Unidos (xx). Aparecen mencionados amigos comunes, como Jorge Guillén (vii), Gerardo Diego (vii, xi) y Miguel Artigas (x), y recomienda a personas cercanas para las oposiciones (x) o para la publicación en colecciones como Clásicos Castellanos o Austral (viii, xv, xvi, xviii, xxiii, xxix). Precisamente en esta última colección de Espasa se publica la segunda edición de Hijos de la ira, hecho del que hay alguna constancia epistolar (xvii, xviii). También hay apuntes taurinos de la estancia de Alonso en Colombia y México en 1948 (xxi, xxii), un proyecto conjunto de Historia de la Literatura (xxiv), la invitación a participar en homenajes a Góngora (xxv) y al primer consejo editorial de Revista de Filología Española (xxvii), la recomendación de Dionisio Gamallo para el premio Mariano de Cavia (xxvi) y la renuncia justificada a dar una conferencia en el Ateneo (xxviii).

Quisiera dedicar estas páginas especialmente a Juan Antonio Payno Galvarriato, sobrino de Dámaso Alonso, a quien agradezco su permiso para la publicación de estas cartas. Como ya se ha indicado, los documentos se guardan en la Casona de Tudanca, perteneciente al Gobierno de Cantabria.

I

[Manuscrita. Northampton, Inglaterra. 27 de julio de 1925. N.o 1. 1A y 1B]18.

27.vii. 25

101, Oliver Street

Kingsley Park,

Northampton,

Inglaterra19

Muy señor mío: Por fin puedo enviarle a Vd. el ensayecito prometido20. Lo primero que debo hacer es aconsejarle que no lo lea; nunca he leído, ni espero leer jamás ensayo más confuso, más mal hecho y más aburrido. No tiene ni principio ni fin, ni medio tampoco. Pero me pareció valer la pena de enviárselo porque, como he dejado en blanco una página de cada hoja, los papeles le servirán muy bien para hacer apuntes.

El trabajo me ha sido bastante interesante, por no decir divertido. Un poco melancólico, sí: tanto que me he vuelto poeta lúgubre. He aquí unos versos fúnebres en que no entra ni la más mínima influencia de Young21 –puedo asegurarle.

Querido James: ‘Perdón! ¡Mil veces perdón! Aquí le devuelvo a V. su ensayo. ¡No lo he leído! Es vergonzoso, pero no lo he leído: ¿para qué le voy a mentir? Siempre sin tiempo, angustiado por un sinnúmero de cosas por hacer, fui posponiendo, día tras día, la lectura. ¿Para qué me voy a mentir una vez más, diciendo: «lo leeré mañana»? No: prefiero devolvérselo, confesarle mi falta y pedirle que me perdone. Claro está que si yo fuera V. no perdonaría jamás. Leo ahora esta carta de V. y se la envío porque resulta emocionante cuan a la letra he cumplido su consejo

Perdón! Perdón! Perdón!

Suyo

Dámaso Alonso.

II

[Manuscrita. 1 de abril [de 1927]. N.o 2. 11A]

Centro de Est. Hist.22

1.º de Abril [de 1927]

Sr. D. José María de Cossío

Muy Sr. mío y compañero (en Góngora)23:

He recibido sus Poesías de Lista24, pero la corrección de pruebas de las Soledades25 no me ha dejado hasta ahora tiempo para leer el libro, ni aun, casi, para darle a V. las gracias.

Ahora, algo menos apurado, (recibirá V. las Soledades dentro de muy pocos días) empezaré la lectura. Pero por de pronto quiero darle a V. las gracias por su amabilidad.

Tomo la ocasión por la punta de los pelos: ¿cuándo envía V. su edición gongorina?

Ponga entre sus amigos a

Dámaso Alonso

III

[Manuscrita. Madrid, 12 [de mayo de 1927]26. N.o 3. 12A y 12B]

Membrete de la Junta para Ampliación de Estudios. Centro de Estudios Históricos. Madrid. Almagro, 26. Hotel. Teléfono 30.735]

Hoy Jueves, 12.

Sr. D. José M.ª de Cossío

Querido amigo:

Recibí sus Romances y los entregué puntualmente en la Revista27. Supongo que habrá V. recibido ya las primeras galeradas. El criterio para las mayúsculas es difícil de fijar: mi edición de las Soledades28 se resiente de ello. Yo he puesto con mayúscula algunas palabras como nombres de vientos etc… que ahora me parece29 que estarían mejor con minúscula. Creo que la mayor aproximación al uso moderno sería lo más pertinente.

Dígame si ha recibido el ejemplar que he mandado a Tudanca. Me interesa saberlo porque los encargados de enviar por correo los ejemplares dedicados de las Soledades se han armado un verdadero lío y a estas horas no sé quiénes lo han recibido y quiénes no.

Muchas gracias por sus alentadoras palabras. Lo que yo deseo ardientemente es que desde este año termine para siempre la estúpida proscripción de Góngora. Trabajemos todos desinteresadamente por ello.

En cuanto recibí su envío me apresuré a entregarlo en la Rev. de Occ. No lo he podido examinar detenidamente. ¡Lástima que no se haya V. decidido a escribir un prólogo extenso!

Mándeme en todo lo que le pueda servir y reciba un abrazo

de

Dámaso.

IV

[Manuscrita, sin fecha30. Madrid, ¿? [de junio] de 1928. N.o 4. 13A y 13B]

Q.do José M.ª:

Dentro de poco voy a Santander y te veré. Ahora, si estás en Tudanca, te agradeceré investigues con un poco de rigor esto. Dices (en Bol. Bibl. M. Pelayo, ix, 121)31:

Podrello ¿hay alguna otra forma de la palabra? «ramal grande hecho de varas de avellano retorcidas»32.

Este ramal, ¿tiene algún uso particular? ¿Sirve para varias cosas? Etc.

Otra cosa: ¿cómo se llama ahí al par de encuarte, y al encuartar? ¿Qué instrumentos, cadenas, varales etc, se usan para encuartar? ¿Encuartan para asar, o solo para el carro? Etc.

Haz el favor de no tomarlo a cachondeo, como acostumbras, sino de preguntar a algún prudente y experimentado indígena y ver la cosa por ti: Tengo un art.º en prensa sobre este tema.

Un abrazo fuerte

Dámaso

Estaré en Santander33

Los Escalante(s), 7

Chez Madame Ramírez

hasta el día último de Agosto.

Vale et convalesce.

V

[Manuscrita. Cambridge, Inglaterra, 19 de octubre de 1928. N.o 5. 2A y 2B]

Shaftesbury House

Shaftesbury Road

Cambridge, 19 de Oct. 1928

Querido José M.ia: En Cambridge recibo tu carta, que me reexpiden de Madrid. Mucho te agradezco tu amable invitación: la esgrimiré para asaltar tu casona algún día. Este verano abandoné Santander al día siguiente de dejarte mi carta. Tenía muchas cosas que hacer y estaba deshecho de un viaje horrible desde Madrid.

Luego estuve en Cabezón34, donde pasaba el verano mi novia35 (porque ahora tengo novia, y es gran lástima que tú no busques otra para ti). Todo el tiempo estuve pensando en la excursión a Tudanca, sin poder realizar nunca mis propósitos36.

No sé si has visto la reseña de tu edición de Lista37. Creo que está en el cuaderno 3 del año 1927 de la R.F.E38. Me alegraré de que te guste.

El libro sobre Góngora continuará inédito sabe Dios cuándo. Necesitaba unos meses libres para dejarlo a mi gusto. No los tengo ahora.

Iré a Madrid para pasar las vacaciones de Navidad y volver otra vez a Inglaterra. No sería imposible el que nos viéramos, porque tú eres un viajero infatigable39.

Mándame en lo que gustes si necesitas algo de aquí y recibe un abrazo muy apretado de Dámaso.

VI

[Mecanografiada. Cercedilla, Madrid, 31 de agosto de 1931. N.o 6. 3A]40

«La Atalaya»

Cercedilla, 31 de Agosto de 1931

(prov. de Madrid)

Sr. D. José María de Cossío

Querido José María:

He sabido por Jorge Guillén41 que os gustaría tener un trabajo mío para el homenaje a Artigas42. Yo, encantado. Falta que me digas: 1) Hasta qué fecha llego a tiempo. 2) Hasta qué número de páginas me abrís cuenta: porque desgraciadamente para los lectores, los artículos que os puedo dar son muy largos. De treinta a cuarenta páginas de la RFE43. No seas perezoso, toma la pluma y contesta. Me molestaría mucho no colaborar en el homenaje a nuestro Artigas. Y ya estaba algo enfadado con vosotros porque no os acordabais para nada de mí. Pero es que del infinito número de tus amigos (número prodigioso), Dámaso es el que cuenta por menos. Todo sea por Dios. ¡Como soy tan agrio, tan desagradable, tan mala persona! Tú me lo has dicho (en el C. de E. H.)44.

Y, claro, publicas un Polo de Medina, y hay Polos de Medina hasta para el gato. Para todos, menos para mí. Y eso que de dos libros que me diste, de los que has escrito, dos reseñas mías salieron en Revista de Filología Española45, y creo que elogiosas, cierto que los libros lo merecían (¡Como soy tan agrio, tan desagradable!).

Adiós, José María. No te guardo rencor porque en el fondo soy de manteca y pasta flora. Te envía un abrazo

tu amigo

Dámaso.

A ese Ganeloncillo46 de Gerardo dile de mi parte que no me parece bonito que se ande paseando por Madrid y no aparezca por casa.

VII

[Manuscrita. Madrid, sin fecha [¿? de ¿noviembre? de 1931]. N.o 9. 16A]

Ferraz, 72

Madrid.

Querido José María:

Ahí te va el latazo: pobre ofrenda para el gran Artigas47. Sálveme la intención.=

Recibí Polo de Medina y los Toros48. Como tuyos, pergeño sendas reseñas para la R.F.E.

Quisiera corregir mi artículo en pruebas (probablemente, añadiré –aún– alguna nota). Estoy en Madrid hasta el 12 de Enero: puedo corregirlo.

1.º) o antes del 12 de Enero.

2.º) o entre el 14 de Marzo y el 20 de Abril.=

porque no quisiera hacer la corrección en Inglaterra (no tengo allí libros).

Dime qué puedo hacer.

Tuyo, con un abrazo

Dámaso.

VIII

[Manuscrita. Chamartín de , Madrid, 10 de julio [de 1932]. N.o 7. 14A, 14B 14C y 14D]

Toma nota de mis nuevas señas49

Colonia del Zarzal

Carretera de Chamartín

Chamartín de la Rosa

(Provincia de Madrid)

Hoy 10 de Julio

Querido José María:

Yo estoy en Madrid y en excelente coyuntura para corregir las pruebas de mi colaboración en el Homenaje a Artigas50.

Una pregunta. Estoy terminando mi artículo sobre el Polifemo (Góngora-Carrillo). Cito como traductores en verso51 o imitadores españoles de importancia (traductores o imitadores de la fábula)52 a

Castillejo

Gálvez de Montalvo

Pérez Sigler

Sánchez de Viana

Barahona de Soto (en la Angélica)

Carrillo

Góngora

Lope (en la Circe)

No me interesan imitaciones de una frase o un incidente, sino de toda la fábula o de fragmentos importantes de ella. ¿Puedes darme –así, de momento– algún nombre más?53 No me interesan tampoco en términos generales las imitaciones posteriores al Polifemo de Góngora (Polifemo y Circe, Parodia de Castillo Solórzano, etc…).

Pero como mi erudición es muy limitada y mi memoria pésima tengo miedo de dejarme alguna imitación de primerísimo orden.

Gerardo se está portando conmigo54. Hace más de un mes que le escribí preguntándole señas de familias o pensiones recomendables para unas señoritas inglesas alumnas mías, y hasta ahora. Las señoritas deben estar ya en Santander y cagándose en mi estampa y en mi manera de prometer maravillas. Te ruego que si se presentan en la Biblioteca Menéndez Pelayo (especialmente Miss Mawson) las atendáis con trato de nación privilegiada.

Es posible que para Agosto haya una visita. Si estás en Santander. Tampoco sería difícil que me encamine por tus montañas.

Adiós, José María

Dámaso.

Esos [….]55 de la R.F.E. no han publicado aún las reseñas. Creo que irán en el 1.er número.

IX

[Manuscrita. Sin fecha56. N.o 13. 20A y 20B]

Querido José M.ia: A lo hecho, pecho. Perdóname que te diga que no me fío mucho de v(ues)tras correcciones, imprentas, etc… Espero un océano de erratas, y me conformo. También había querido unas tiradas aparte: ¿sabes si las han hecho?57 Por lo menos (exigencia mínima): supongo que me enviarán un ejemplar del primer volumen del Homenaje (puesto que está tirado), y otro del segundo (cuando lo acaben de imprimir).

¡Ay, ay, ay!

Muchas gracias por tus datos: A la fábula del Genil58 me refería de pasada (en nota). No me pareció imitación bastante cercana para que me resultara ejemplar (porque yo no cito todas estas imitaciones sino arrimando el ascua a mi sardina). Naturalmente, conocía la de Bustamante (poseo una ed. tardía): no me interesa por estar en prosa. Muy interesante el dato «Cap.Aldana»59, que me parece voy a utilizar.

Un abrazo fuerte,

Dámaso.

Toma nota de mis nuevas señas:

Colonia del Zarzal

Carretera de Chamartín

Chamartín de la Rosa

(Prov. de Madrid)

Claro está que las del Centro valen siempre.

X

[Manuscrita. Sin fecha [¿Enero de 1933?]. N.o 10. 17A y 17B]

Querido José María: Perdona que te escriba en este papel: es lo que tengo a mano60.

Te escribo para pedirte un favor. Mi cuñada María Galvarriato61 se presenta a las oposiciones de bibliotecas de las que es juez Sánchez Reyes62. Yo a éste le conozco algo, pero no suficientemente para intervenir.

¿En qué términos estás tú con Sánchez Reyes? Supongo que buenos. Si así fuera y tú creyeras que tu intervención podría ser eficaz, te agradecería que le hablaras o escribieras sobre el caso con esa vehemencia que tú pones en servir o defender a tus amigos.

La chica ha trabajado mucho y espero que quede bien, pero nadie está libre de una equivocación o una sacudida de nervios (y menos una mujer).

Muchas gracias, José María.

¿No vienes nunca con tu equipo63 por aquí? ¿Fue a ti a quien quiso agredir el entrenador del Racing64? Vaya hombre.

He visto que publicas y no me mandas nada. Me parece mal. Apunta bien mis señas:

Balmes 180, 1.º 1.ª

Barcelona.

Un abrazo fuerte,

Dámaso

Las oposiciones de marras empiezan enseguida: el día 27 creo65.

XI

[Manuscrita. Chamartín de , Madrid, 29 de junio de 193366. N.o 19. 4A y 4B]

Colonia del Zarzal

Chamartín de la Rosa

Prov. Madrid

Junio 29.33.

Querido José María:

He pecado contra el cielo y contra ti y no soy digno de llamarme amigo tuyo.

Hace muchos meses (¡muchos meses!) que me mandaste un artículo para que te dijera si me parecía propio para la RFE.67, y no te he contestado todavía.

Lo que sigue no pretende ser una justificación, sino una explicación, sólo una explicación de cómo las circunstancias han colaborado con mi espantosa desidia y aparente ingratitud.

Tu carta con el artículo llegó al CEH cuando llevaba yo pocos días en Inglaterra, y permaneció en el CEH hasta que regresé a España para hacer las oposiciones68.

Llegué a España con todos los nervios de punta de un opositor bisoño: certificados que faltaban, memorias que había que escribir, temas en que estaba «pez», etc.

Y cuando estaba con esta excitación, zas, un fuerte ataque de gripe. Diez días de cama con un calenturón y luego dos semanas con eso que llaman ahora febrícula los pedantones de los médicos.

Siguen mis desgracias, porque cuando ya empezaba a reanudar mi trabajo, ¡otro nuevo ataque de gripe! («reflorescencia», según la pedantería profesional). Y después de ese segundo ataque un mes de decimillas, y de estar baldado, deshecho, y dado a los demonios porque pensaba que no podría hacer las oposiciones.

Fue cosa de milagro. Porque las décimas se me quitaron y me volví a sentir «persona» la misma semana en que empecé a actuar.

El 19 o el 20 de Abril fue la votación y el 23 empezaban mis clases en Oxford.

Llego a Oxford, trabajo brutalmente siete semanas, y me vuelvo a Madrid, para tomar posesión69.

Resumo: mucha burocracia, muchas vueltas, otra gripe, tomo posesión con 38º. Y ahora por fin, respiro. Y te escribo.

No no pretendo justificarme. Pero que esta historia pueda servir para que te inclines más benévolamente al perdón.

Y ahora voy a tu artículo. A mí cuando lo leí me pareció que no se amoldaba bien al tipo que es ya tradicional en la Revista. Pero como nunca me fío de mi criterio se lo he dado a leer también a Montesinos70 (espero que no te parezca mal), y él cree lo mismo que yo.

Ahora que el artículo está bien, como tuyo, y puede figurar perfectamente en revistas de técnica menos limitada que la de Filología. A mí se me ocurre la del Ayuntamiento de Madrid71, o la nueva «Cruz y Raya»72.

Yo conservo el artículo y te pregunto si quieres que haga alguna gestión en este sentido.

Querido José María:

Dime que me absuelves, quítame este peso de encima. Mea culpa, mea grandissima culpa!

Un abrazo de

Dámaso

Espero verte este verano en Santander.

XII

[Manuscrita. Sin fecha. N.o 12. 19A]

José María:

He recibido un texto preparado por Alfonso Reyes creo que de El Peregrino en su Patria, para que se imprima en España73. ¿Crees tú que eso iría bien en C.C.74?

Un abrazo

D.

XIII

[Manuscrita. Sin fecha. 15B]

Adiós,

Tuyo siempre

Dámaso Alonso.

Estaré en Madrid en Diciembre para pasar las Navidades.

XIV

[Manuscrita. 1 de marzo 1936. Leipzig. Tarjeta postal del Reichsgericht de Leipzig. N.o 20. 5A]75.

Un fuerte abrazo desde Leipzig.

Dámaso

XV

[Manuscrita. Sin fecha [¿1943?76]. N.o 11. 18A y 18B]

Q.do José María, gran hombre:

Ahí te envío a Vicente Gaos Pola (tú conoces su traducción de Péguy, en Adonais)77. Es hermano de Pepe Gaos y se ha alzado con todo el talento de la familia. ¿Qué se puede hacer en Calpe por él? Es un talento literario, auténtico. Y no como los que tú descubres, poeticas de alorza (sic). Bueno tú verás: in manos tuas &c.

Gaos necesita hacer la carrera; y para hacerla, medios económicos. Perfecto conocedor del francés; grande, del latín; suficiente, del inglés. Tú verás. Algún día me darás las gracias de que te haya presentado a Vicente Gaos. Con que, abre el ojo, gran hombre. Abrazos D.

XVI

[Manuscrita. Sin fecha [c. 1943]. N.o 14. 21A y 21B]

Q.do José María:

Alonso Zamora, Catedrático de la Universidad de Santiago78, es una de las poquísimas personas que reunen toda la preparación literaria y lingüística necesaria para editar un texto. Tiene preparado un texto de Fr.co de la Torre que viene como anillo al dedo para v(ues)tros «Clásicos Castellanos»79. Espero que os interese.

Con Alonso me une la más entrañable amistad80. Supongo que os haréis muy buenos amigos81.

Abrazos (de los tuyos)

de

Dámaso

No me has dejado mis restos!

XVII

[Manuscrita. Sin fecha [c. 1945]. N.o 15. 22A]

Membrete de la Real Academia Española]

Q.do José María:

Acuérdate de mi82

Dámaso

Hijos de la ira

XVIII

[Manuscrita. Sin fecha [c. 1946]. N.o 16. 23A y 23B]

Q.do José María:

No te hablaré de las erratas de mi librito de la Austral83, porque es como para morirse, y porque perderíamos las amistades.

Te recordaré sólo que te recomendé a Gonzalo Suárez, cat.º de instituto sancionado, y hoy día bibliotecario del Instituto Francés84. Me dijiste que tomaríais en consideración la propuesta de traducciones que os hacía, para la Austral. Va ahora para ocho meses.

¿Quieres ponerme dos líneas y decirme qué hay?

Un gran abrazo de

Dámaso

XIX

[Manuscrita. Sin fecha [c. 1947]. N.o 21. 26A y 26B]

Q.do José M.ª:

Ya me gustaría estar contigo en esa Casona que solo he visto de lejos porque nunca me has invitado.

Yo he estado todo el verano en Madrid sin más excursión que una tarde en Pozuelo, que también tiene su interés.

Ahí te envío las cuartillas sobre tu Francia. No dirás que no respondo inmediatamente a la más discreta insinuación. Supongo que tú –venciéndome en delicadez– me regalarás el Bécquer (al que le he tomado mucho cariño).

Te leo siempre y siempre con gusto en ABC, aunque un poco sorprendido por el matiz político de algunos artículos. Eso de los contemporáneos y coetáneos de Ortega es un cuento chino del maestro.

Un abrazo fuerte con el cariño de tu muy olvidado

Dámaso

Desde que te han hecho académico no te ajuntas conmigo85.

XX

[Manuscrita. New Haven (Estados Unidos), 14 de febrero de 1948 [matasellos]. N.o 23. 28A y 28B]

Q.do José María, gran hombre:

Aquí me tienes en las Américas, bastante [] y deseando perderlas de vista, pero me parece que va para largo porque me llueven contratas hispanoamericanas. No hay más remedio que sacrificarse.

Supongo que verás al Eusebio86 y al Emilio87 y que os acordaréis alguna vez de mí. Pero no te acordarás, porque siempre has sido un egoistón.

Aquí estoy guisándome el desayuno, cosa no del todo fácil. (Me imagino tu despectivo comentario). Llevo tres días intentando hacer café con un aparatito que aseguran (los vendedores) es estupendo. Rotundo fracaso.

En cambio dispongo de un apartamento principesco (o que a mí me lo parece): gran sala de 11 metros; despacho con toda una biblioteca italiana que uso yo solo; alcoba; dos cuartos roperos; cocina eléctrica con horno (idem) y nevera (idem); un ascensor fantasma con una puerta diabólica (de verdadero auto de fe) que me mete solo en la cocina (palabra!) y ¡tres puertas más, a dos escaleras!

Todo era hermoso si no hubiera que fregar los platos del desayuno.

La lucha principal es contra la calefacción. Los tres primeros días he creído que tenía fiebre. Luego fui notando que quitándome los zapatos, mejor; la chaqueta, mejor; los pantalones, mejor, etc. Usque ad paradisiacam nuditatem. Y si hubiera tenido un pay-pay, dicha completa. Ahora me he decidido a tener siempre cevados todos los radiadores del apartment, y así vamos viviendo.

Aquí por respirar te soplan un dólar y por toser dos. ¡Qué tíos! Si me apuráis os digo que dólares y pesetas allá se van. Bueno, exagero (muy poco), pero no deis por un dólar nunca más de 12 pesetas, aunque os aspen. Esos canallas que compran dólares a 40 ptas. son unos idiotas y los debían meter en la cárcel por malos españoles y por memos.

Aquí en esta Universidad todos los que se interesan por el español están muy bien dispuestos respecto a España.

El apartment lo tengo en Saybrook College (tiene el n.º 979) pero mis señas son

Spanish Department

Yale University

New Haven, Conn.

Al medio día y por la noche como (digamos) en el comedor del colegio. (Ay, criolla de mi alma!) Pasamos con una bandeja delante del marmitonado88 y nos van echando bazofia de diferentes colores. Lo mejor suele ser un picadillo en el que «intuyo» algunas proteínas sintéticas. Bueno, miento: la leche es de cojón de mico y la dan a tutiplén. Ahora que a mí me hace daño acostumbrado al agua con alusiones de las vaquerías madrileñas. Pero quitando la leche y el pan, y quizá la mantequilla, lo demás cero. De todos modos pasar con la bandejita por delante del laboratorio te cuesta un dólar y medio, y comer decentemente en un restaurant (¡decentemente solo!) de dos y medio para arriba.

Escribidme. No me hagáis encarguitos que supongan desembolso, y acordaos de este desterrado

Dámaso

¿Cuándo entras en la Academia? Hoy le pongo un telegrama a Gerardísimo89.

XXI

[Manuscrita. Manizales (Colombia), 22 de octubre de 1948. Tarjeta de la Peña Taurina Manizales. N.o 24. 6A]

Querido José María: Para que veas la importancia que dan en Manizales (Colombia) a mis conocimientos taurinos.

Con un abrazo de

Dámaso

Manizales, 22 de Oct. 1948,

Día en que cumplo medio siglo90.

XXII

[Manuscrita. Monterrey (México), ¿? de noviembre de 1948. Reverso de la entrada de la Plaza de toros de Monterrey. N.o 22. 27A]

Querido José María:

Ahí te envío estos recuerdos de la corrida celebrada en Monterrey, Méjico, el domingo 28 de Nov. de 1948. Se despidió de la afición regiomontana Armillita91, y con él alternaba Luis Procuna. Esta ciudad de Monterrey está cerca de la frontera y la plaza estaba llena de gringos. La corrida fue un desastre. A Armillita le dieron las dos orejas de la primera cabra. ¡Que Dios los perdone! El Procuna me gustó aún menos.

Un abrazo de

Dámaso

Aquí tienes un cartel enorme92. Tu libro está en todas las manos93.

XXIII

[Manuscrita. Sin fecha. N.o 17. 24A, 24B y 24C]

Mi querido José M.ª:

Después de telefonearte inútilmente a Espasa tres o cuatro veces te escribo.

Recordarás lo de Entwistle (las tres conferencias eran insuficientes: había que traducir algo). Eulalia ha traducido ya 3 artículos (uno breve, uno largo, uno mediano) entre lo que el autor señaló como traducible. Queremos enviártelo para que veas si basta para completar tomo: así lo creo (uno solo de estos artículos tiene 50 págs. de la Revue Hispánique). Ahora lo que quiero también es que consigas de la casa que paguen pronto el trabajo de Eulalia (ha dedicado mucho tiempo porque es endiabladamente escrupulosa).

Otro asunto. Eulalia tiene hecha una estupenda antología del Cancionero popular de Lope. ¿Lo queréis editar? Sería bonito como para Clásicos (hay unos tomos de lírica lopesca por Montesinos pero lo popular en ellos es poco). Si no queréis para Clásicos, podía valer para la Austral, a condición de que pagaran una cosa decente.

Contéstame pronto a todo esto. Si yo no estuviera en casa habla con Eulalia.

Devuélveme sin excusa el tomo de don Ramón (de la Austral) que te llevaste.

Un abrazo

Dámaso

XXIV

[Manuscrita. Sin fecha. N.o 18. 25A y 25B]

Q.do José María:

Ahí van los tres artículos traducidos por Eulalia. Espero que te parezcan bien.

Cada vez pienso más en la posibilidad de que hiciéramos la Historia de la Literatura. Todo sería que Espasa nos la quisiera pagar bien. ¿Qué te parece una historia de la literatura entre nosotros dos solos: una Hist.ª de la Literatura en (quizá) 9 tomos

1.º Edad Media

2.º Renacimiento temprano (s. xv)

3.º Renacimiento (1.ª mitad s. xvi)

4.º Tránsito del Renacim(ien)to al Barroquismo (Felipe II)

5.º Barroquismo (s. xvii)

6.º Neoclasicismo (s. xviii)

7.º Romanticismo y posromanticismo (hasta 1870)

8.º Realismo

9.º Contemporánea94

Tú podías hacer los 5 últimos y yo los 4 primeros. Propónselo a ellos. Yo solo me meteré en ello su me pagan muy bien, porque es como meterse monje.

Un abrazo de

Dámaso

Claro que la distribución en tomos puede cambiarse según convenga. Dime qué te parece =

XXV

[Mecanografiada. Madrid, 10 de febrero de 1961. N.o 25. 7A]

Membrete del Instituto Miguel de Cervantes, CSIC, Duque de Medinaceli, 4. Teléfono 22 29 29. Madrid]

Madrid, 10 de febrero de 1961.

Señor don José María Cossío.

Mi querido amigo: La RFE prepara, con motivo del cuarto centenario del nacimiento de Góngora95, un número homenaje al poeta y una Biblioteca gongorina; se publicarán, en uno y otra, artículos de asunto gongorino o relacionados con él –temas, influencias, etc.–. A la RFE le agradaría contar con tu colaboración y, para ello, te ruego que me indiques en qué consistiría y la fecha aproximada de la misma, ya que es nuestro propósito no demorar la publicación.

En espera de tus noticias, recibe un abrazo de

Dámaso

Puedes contestar a Alfredo Carballo Picazo. Modesto Lafuente 35, 5.º. Madrid-3.

XXVI

[Manuscrita. Madrid, 13 de febrero de 1964. N.o 26. 8A y 8B]

Membrete de la Real Academia Española]

Avda. Alberto Alcocer, 33

Madrid 16

13 de Feb.º 64

Mi q.do José María:

He venido, aunque estoy malo, a la Academia para verte, y resulta que no vienes. Mala suerte.

Quería hablarte, porque he oído que estás en el Cavia. Quiero decirte que se presenta Dionisio Gamallo Fierros96, gran amigo, al que tú conoces muy bien, y hombre de gran condición sobre temas de siglo xix y del xx, y de gran instinto crítico y apasionada capacidad para expresarlo.

Se ha presentado al Cavia varias veces. Hoy se presenta de nuevo con un artículo sobre Gómez de la Serna. Es un artículo escrito el día siguiente de llegar la noticia de la muerte de Ramón: es una reacción verdaderamente periodística, de un hombre lleno de pensamiento y aprecio de la obra. La noticia es como un pinchazo, y saltan al exterior del modo más natural esos datos y esos conceptos.

Hay que tener en cuenta que Gamallo ha escrito miles de artículos como ése. Como Dionisio es demasiado independiente y sincero y justo, y no está en el grupo de tal ni en el de tal, no ha tenido nunca premio alguno. Mucho me gustaría que ahora se le diera la recompensa que me parece justa.

Como yo no tengo muchas simpatías en esa casa donde lo dan, te ruego que de ningún modo hables para nada de mi intervención en el asunto, pues esto antes le perjudicaría a él que otra cosa.

Muchas gracias por lo que puedas hacer en esto y un gran abrazo de

Dámaso.

XXVII

[Mecanografiada. Madrid, 27 de febrero de 1964. N.o 27. 9A]

[Mecanografiada. Membrete de la Revista de Filología Hispánica, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Miguel de Cervantes. Duque de Medinaceli, 4. Teléfono 222 29 20. Madrid-14].

Madrid, 27 de Febrero de 1964

Prof. Dr. José María de Cossío

Paseo de las Delicias 6-8

Madrid-7

Mi distinguido amigo y colega:

En este año de 1964 se cumple el cincuentenario de la aparición del primer volumen de esta Revista de Filología Española, cuyos primeros fascículos aparecieron bajo la dirección de D. Ramón Menéndez Pidal y de sus discípulos inmediatos.

Durante 50 años esta publicación se ha esforzado en recoger las aportaciones de los filólogos dedicados al estudio del español, y ha logrado constituir un instrumento de trabajo de gran eficacia para toda la Filología Románica.

Por ello nos ha parecido que sería oportuno dedicar un homenaje al Consejo de Dirección que fundó y puso en marcha esta Revista. Y hemos pensado pedir la colaboración para este volumen extraordinario a los directores de las revistas filológicas actualmente en publicación, y a cuantos han formado parte desde 1914 de nuestros cuadros de redacción.

Nos honraría mucho que usted aceptase esta invitación y nos mandase un trabajo antes del mes de Junio próximo para el volumen homenaje que pensamos sea el correspondiente a 1964.

En espera de sus gratas noticias te97 saluda

Dámaso Alonso

Director

XXVIII

[Manuscrita. Madrid, 15 de febrero de 1966. N.o 28. 10A y 10B]

Avda. Alberto Alcocer, 33

Madrid 16

15 de Feb.º 66

Mi q.do José María:

Te ruego que dejemos aplazado lo de mi conferencia en el Ateneo98. De Salamanca me piden una intervención en acto a la memoria de Manolo García Blanco99. La buena amistad que tuve con él me obliga a aceptar. Tengo, pues, que dedicar el poco tiempo libre (después de cursos y academias) a revisar la bibliografía de G.ª Blanco, numerosísima, aunque casi todo sean notas pequeñas y esparcidas. De ellas me faltan la mayor parte, y el trabajo de encontrarlas por esas revistas y bibliotecas, no es pequeño.

No tengo tiempo, en absoluto, de preparar ahora la conferencia para el Ateneo.

Lo siento muchísimo. Espero que lo comprendas y que no te disgustes demasiado.

Un abrazo de

Dámaso

XXIX

[Manuscrita. Sin fecha. Madrid. 29A y 29B]

Membrete del CSIC. Instituto «Antonio de Nebrija». Duque de Medinaceli, 4. Madrid]

Mi querido José María de Cossío:

Tengo mucho gusto en presentarte a mi amigo el catedrático del Instituto Cervantes de Madrid don Alberto Sánchez100. Quiere proponerte algún tomo para Clásicos Castellanos.

Alberto Sánchez es persona de toda competencia en quien puedes fiar. Mucho celebraré que os arregléis.

Un abrazo

Dámaso

Mario Crespo López

Correspondiente de la Real Academia de la Historia


  1. Peña Labra, n.º 45, otoño de 1982, «Presencia de Dámaso Alonso», serie «La Casona de Tudanca», 6, con facsímil de los poemas de Alonso en el Cancionero de Cossío, tomo i, folios 105-127v, y un encarte facsimilar con seis de las cartas, que en este epistolario señalo con los números iii, iv, v, viii, xi y xv. Se incluyen estas cartas en RAE ADA-i-1-572.

  2. Se publican fragmentos en Mario Crespo López, «Dámaso Alonso y José María de Cossío. Noticia de una amistad», El Maquinista de la Generación. Revista de cultura, n.º 22-23 (mayo 2013), p. 184-192.

  3. Rafael Alberti. Correspondencia a José María de Cossío seguido de Auto de fe y otros hallazgos inéditos, edición y estudio por Rafael Gómez de Tudanca y Eladio Mateos Miera, Valencia, Pre-Textos, 1998.

  4. Julio Neira, «De Aleixandre a Cossío: cartas de posguerra», Boletín de la Biblioteca de Menéndez Pelayo, lxxiv (1998), p. 369-403.

  5. Gerardo Diego / José M.ª de Cossío. Epistolario. Nuevas claves de la Generación del 27, prólogo de Elena Diego, edición, transcripción y notas de Rafael Gómez de Tudanca, Madrid, Ediciones de la Universidad / Fondo de Cultura Económica, 1996. También Gerardo Diego. Epistolario santanderino, edición de Julio Neira, Santander, Ediciones de Librería Estudio / Ayuntamiento de Santander (colección Pronillo, 21), 2003.

  6. Jorge Guillén y José M.ª de Cossío. Correspondencia, edición crítica de Julio Neira y Rafael Gómez de Tudanca, Valencia, Pre-Textos, 2002.

  7. Las cartas de Miguel Hernández a José María de Cossío, introducción de Vicente Aleixandre, prólogo, estudio y notas de Rafael Gómez, Santander, Institución Cultural de Cantabria, 1985. También Obra completa. II. Teatro. Prosas. Correspondencia, edición crítica de Agustín Sánchez Vidal y José Carlos Rovira con la colaboración de Carmen Alemany, Madrid, Espasa-Calpe (Clásicos castellanos, nueva serie), 1992.

  8. Manuel Altolaguirre. Epistolario. 1925-1959, edición de James Valender, Madrid, Publicaciones de la Residencia de Estudiantes, 2005.

  9. Luis Cernuda. Epistolario 1924-1963, edición de James Valender, Madrid, Publicaciones de la Residencia de Estudiantes, 2003.

  10. Epistolario, II, introducción, edición y notas de Christopher Maurer, Madrid, Alianza, 1983.

  11. Pedro Salinas / Jorge Guillén. Correspondencia (1923-1951), edición, introducción y notas de Andrés Soria Olmedo, Barcelona, Tusquets (Marginales, 120), 1992.

  12. Sobre José María de Cossío, pueden consultarse Rafael Gómez de Tudanca, Semblanza y obra de José María de Cossío. Contribución a la bio-bibliografía, preludios de Gerardo Diego y Alonso Zamora Vicente, Santander, Sociedad Menéndez Pelayo 2000; Mario Crespo López, El 27 y la Universidad Internacional de Santander, Santander, Fundación Gerardo Diego (Bodega y Azotea, 1), 2009, e ídem, José María de Cossío. Vida hasta la Guerra Civil (1892-1939), Santander, Icom Global, 2010.

  13. Sigo la biografía de Ángel Zorita, Dámaso Alonso, Madrid, Epesa (Grandes escritores contemporáneos, 83), 1976, una de las pocas existentes sobre Alonso, aunque ciertamente divulgada. Se han publicado expresamente las «Cartas a G. Díaz-Plaja», Memoria. Revista de estudios biográficos, 3 (2007), p. 109-117.

  14. Los poemas de Dámaso Alonso, copiados en 1941 «a petición de José M.ª de Cossío», están encuadernados en el tomo I del Cancionero, p. 105-127bis. Son los siguientes: «A vida o muerte» (incluye «Thánatos», «Vida», «Viaje», «Morir» –título de dos poemas–, «Cancioncilla»), «Epigramas» (incluye «La victoria nueva» y «Elemental»), «Tormenta» (incluye «Pausa», «El indiferente», «Profundidad», «Burla», «Noche» y «La fuente»), «A una habitación», «Mozuela de Castilla» (1916), «Estampas» (incluye «Mañana lenta», «Chopo en la niebla» y «Ronda»), «Viento de noche», «Patria» (Dieppe, 1923), «Puertociego de la mar», «Ejemplos», «Los insectos» (1930), «Los 4 reyes» (1920), «La noche fría y serena de la calle de Carranza», «Ejercicio de ritmo, núm. 11», «Motivo viejo y sentimental», «Explicación actual», «A un poeta muerto» (Valencia, 1938). Una de las curiosidades de este conjunto manuscrito es que «Los insectos», una de las composiciones más conocidas del influyente Hijos de la ira (1944), está en una primera versión en prosa y fechado en 1930; Alonso habría de situar su versión cuasi definita en agosto de 1932. Fue Leopoldo de Luis, «El Cancionero de Cossío», Ínsula, n.º 444-445 (noviembre-diciembre), p. 21, el primero en observar este detalle cronológico. Véase también Matilde Sagaró Faci, «Cancionero de José María de Cossío. Un cancionero inédito del siglo xx», Actas III Simposio de lengua y Literatura Españolas. Madrid, 21, 22, 24, 29 y 31 de octubre de 1996, Madrid, Asociación de Profesores de Español, 1997, p. 55-56. Sobre el Cancionero, Mario Crespo López, El Cancionero de José María de Cossío. Una memoria poética del siglo xx, Madrid, Visor, 2015.

  15. José María de Cossío, «Notas a romances», en Studia philologica. Homenaje ofrecido a Dámaso Alonso por sus amigos y discípulos con ocasión de su 60.º aniversario, I, Madrid, Gredos, 1960, p. 413-429; ídem, «Recuerdos de una generación poética», en Homenaje universitario a Dámaso Alonso reunido por los estudiantes de Filología Románica. Curso 1968-1969, Madrid, Gredos, 1970, p. 189-202.

  16. En el Archivo de la Casona de Tudanca otros autores que escriben a Cossío hablan de Alonso, por ejemplo, Antonio Ballesteros Beretta, Madrid, 1 junio 1942, tras asistir a una conferencia del catedrático, seguramente la lectura que dio de uno de los capítulos de su obra inédita sobre San Juan de la Cruz, el 11 de mayo de 1942. Por otro lado, en la carta del profesor José Luis Varela Iglesias al autor de este artículo, Madrid, 20 de mayo de 2013, sobre sus recuerdos de Cossío, uno de ellos, «en la Castellana, cuando salía de dar el pésame, con Dámaso y Menéndez Pidal, año 60, a la familia de don Gregorio [Marañón], y los acompañé hasta el coche que la Academia alquilaba entonces para los actos de su Presidente (un aparatoso trasto americano)».

  17. Fue el caso, por ejemplo, de la poeta Concha Zardoya (1914-2004), que escribió dos cartas a Cossío, ambas referidas a su proyecto de traducción del libro de Walt Whitman Hojas de hierba. El trabajo estaba destinado inicialmente a la editorial Aguilar pero, no convenciendo a la escritora las condiciones del contrato, el 7 de noviembre de 1944 lo ofreció a Espasa Calpe (a Cossío, por tanto), con el apoyo de Dámaso Alonso. Parece que Cossío contestó en noviembre de 1944 confirmándole que la traducción podía interesar para la colección Austral; el 3 de septiembre de 1946, casi dos años más tarde, Concha Zardoya insistiría en el mismo asunto. Vid. Mario Crespo López, «Epistolarios femeninos de la Casona de Tudanca. Cartas de mujeres a José María de Cossío (1892-1977)», Altamira, tomo lxxxi (2011), p. 155-201.

  18. La primera carta del epistolario es para mí un enigma. Según la digitalización del Archivo de la Casona de Tudanca, es una cuartilla escrita por Dámaso Alonso por las dos caras. En la primera («1a» puesto a lápiz en la esquina superior derecha) consta la fecha y dirección de envío; con una tinta algo más apagada, Alonso (aunque no firma esta cara) se dirige a un «muy señor mío» al que envía un «ensayecito» que desconozco, y que autocritica exageradamente. En el reverso («1b» a lápiz en la esquina superior derecha) parece Dámaso Alonso escribir una sentida respuesta al «querido James», indicándole que, dado que no ha leído el ensayo ni lo va a leer, se lo devuelve. Si la carta llegó a Cossío es porque obviamente Alonso se la envió; y si esto es todo, tal vez se trate de una chanza sobre la tardanza de Cossío o del propio Alonso en leer artículos por diversos motivos: en el primer caso, por cierta pereza; en el segundo, por acumulación de trabajo. Hay que tener en cuenta que entonces Cossío había enviado ya varias notas para publicar en Revista de Filología Española y Alonso había empezado a escribir en Revista de Occidente, donde Cossío tenía cierta mano.

  19. Desde 1923 a 1925 Alonso es «lecturer» de español en la Universidad de Cambridge. Se trata de un período de acercamiento a poetas ingleses (en la carta menciona, de hecho, a Young) y descubrimiento de Góngora.

  20. Como ya he indicado, ignoro a qué «ensayecito prometido» se refiere. Tampoco la referencia al «querido James» posterior.

  21. Edward Young (1683-1765), poeta inglés, autor de los influyentes y «fúnebres» Night Thoughts.

  22. En 1921, al acabar la licenciatura de Filosofía y Letras, había comenzado la vinculación de Alonso con el Centro de Estudios Históricos de la Junta de Ampliación de Estudios. Vid. Ángel Zorita, ob.cit., 1976, p. 32-33.

  23. La expresión «compañero en Góngora» es realmente significativa y cuajada de experiencias e intereses compartidos. El 27 de enero de 1927 un grupo de poetas (Alberti, Dámaso Alonso, Gerardo Diego, Jorge Guillén y Pedro Salinas, más Federico García Lorca, por el que alguien firmó) habían enviado a varios intelectuales y escritores de mayor edad una carta para que participaran en un homenaje a Góngora. Conocida es la disensión de Miguel de Unamuno, por ejemplo, que les contestó desde Hendaya. (La carta se conserva en el Archivo de la Casona de Tudanca, Correspondencia a otros, Hendaya (Francia), 15-ii-1927). Unamuno era muy amigo de los Cossío (había sido profesor de José María en Salamanca) y se había hospedado en la Casona en agosto de 1923. De la Casona salió un paquete vejatorio dirigido a Valle-Inclán, con una cabeza degollada de barbado macho cabrío. Transmite Rafael Gómez de Tudanca, Semblanza y obra de José María de Cossío. Contribución a la bio-bibliografía, preludios de Gerardo Diego y Alonso Zamora Vicente, Santander, Sociedad Menéndez Pelayo, 2000, p. 56, la anécdota narrada por el mismo Cossío: «De su Casona de Tudanca salió un paquete vejatorio en 1927, conteniendo una cabeza degollada de macho cabrío, con sus buenas y doctas barbas, como regalo despiadado para don Ramón María del Valle-Inclán, por su testarudo antigongorismo». El dato lo confirmaría el mismo Dámaso Alonso, «Una generación poética», Poetas españoles contemporáneos, Madrid, Gredos (Biblioteca Románica Hispánica, Estudios y Ensayos, 6), 1988 (3.ª ed., 3.ª reimpr.), p. 158, n. 7: «José María de Cossío –amigo de todos nosotros– preparó uno de los tomos del Homenaje a Góngora, y en su cuarto se confeccionaron los “regalos” enviados a los antigongorinos».

  24. Poesías inéditas de Don Alberto Lista, Madrid, Voluntad, (enero de) 1927.

  25. En abril de 1926 Gerardo Diego, Pedro Salinas, Rafael Alberti y Melchor Fernández Almagro habían concretado la idea de publicar en Revista de Occidente varios volúmenes sobre Góngora. (Vid. Pedro Salinas / Jorge Guillén. Correspondencia (1923-1951), edición, introducción y notas de Andrés Soria Olmedo, Barcelona, Tusquets (Marginales, 120), 1992, p. 65). Finalmente sólo aparecieron en 1927 las ediciones de Soledades por Dámaso Alonso, los Romances por Cossío y En honor de Góngora realizada por Gerardo Diego, loada por el propio Alonso en «La poesía de Gerardo Diego», Ensayos sobre poesía española, Madrid, Revista de Occidente, 1944, p. 319.

  26. Es el 12 de mayo de 1927: aparece después la identificación de que era jueves. Desde la anterior carta del 1 de abril había dado ya tiempo para que la imprenta recibiera el texto de Cossío y compusiera las galeradas.

  27. Revista de Occidente. Cossío publicaba en la revista desde 1925; entre este año y 1928 dio a sus páginas un total de ocho artículos. La edición de los Romances saldría en junio de 1927.

  28. Dámaso Alonso, Soledades de Góngora. 1627-1927, Madrid, Revista de Occidente, 1927, 238 págs.

  29. «me parece» añadido sobre tachadura.

  30. Carta sin fecha, pero anterior, tal vez, al verano de 1928.

  31. José María de Cossío, «Aportación al léxico montañés», Boletín de de Menéndez Pelayo, ix (1927), p. 115-122.

  32. Podrello es la soga hecha con varas que sirve para atar la yerba a la basna, instrumento de transporte típico de las montañas de Cantabria y, obviamente, conocido por Cossío en Tudanca.

  33. Ese mes, en efecto, Alonso estuvo en la capital cántabra, en los cursos de verano que organizaba la Sociedad Menéndez Pelayo dirigidos por el bibliotecario titular de la Biblioteca de Menéndez Pelayo, Miguel Artigas, también destacado gongorista, a quien le unía una gran amistad. Alonso fue uno de los profesores que continuaron su actividad docente en la Universidad Internacional de Verano en Santander, creada en 1932, cuyo primer curso fue en 1933.

  34. Cabezón de la Sal.

  35. Eulalia Galvarriato, cuya familia solía veranear en Cabezón. Según parece, Alonso y ella se habían conocido ese verano, siendo ella profesora del curso de español para extranjeros que el Centro de Estudios Históricos organizaba en la Residencia de Estudiantes.

  36. El tren de Santander llegaba hasta Cabezón de la Sal, desde donde podía realizarse, no sin dificultades, la excursión a Tudanca.

  37. Reseña del libro de Cossío sobre Alberto Lista en Revista de Filología Española (cuaderno 3, 1927).

  38. Revista de Filología Española. Esta publicación es citada también en otras cartas.

  39. Ya entonces Cossío pasaba cada año temporadas en Madrid y Tudanca, pero no era raro que se desplazara a otras ciudades como Valladolid, Salamanca y Sevilla, en coherencia sobre todo con su afición taurina.

  40. Carta publicada en Mario Crespo López, ob. cit., 2010, p. 198-199.

  41. La amistad entre Alonso y Guillén comenzó en 1925.

  42. Desde agosto de 1930 Cossío ocupaba interinamente la dirección de la Biblioteca de Menéndez Pelayo, tras el nombramiento del titular, Miguel Artigas, para la Biblioteca Nacional. Una de sus actuaciones al frente de la Biblioteca fue, por encargo de la Sociedad Menéndez Pelayo, la preparación del Boletín en homenaje a su antecesor en el puesto.

  43. Revista de Filología Española.

  44. Centro de Estudios Históricos.

  45. Se refiere a las reseñas de Obras completas de Polo de Medina y de Los toros en la poesía castellana, que aparecieron en el mismo número de la Revista de Filología Española, tomo xix, cuad. 2.º (abril-junio 1932), p. 199-200. En la de Los toros puede leerse: «Es novedad de el admitir a los más nuevos representantes de la poesía del siglo xx (Lorca, Alberti, Diego, etc)». Cossío animaba la afición taurina de algunos poetas, convirtiendo los toros en tema de la poesía, e incluyó a alguno de los más «modernos» (y la mayoría con textos de hacía apenas tres o cuatro años) en su repaso histórico sobre la lírica taurina. Continuaba Alonso en de Filología Española: «Difícilmente se encontrará hoy quien posea un conocimiento tan minucioso de la poesía española como José María de Cossío. Si no tuviéramos ya muchas pruebas de ello, lo podría demostrar este libro: casi no se le escapa al autor pormenor alguno cuando trata de épocas en que el tema resulta escaso, y cuando abunda (que es lo más frecuente), la forzosa selección de los textos es forzosamente acertada».

  46. Alusión al personaje del Cantar de Roldán Ganelón, tomado como ejemplo de traidor.

  47. Dámaso Alonso, «Góngora y la literatura contemporánea», Boletín de la Biblioteca de Menéndez Pelayo, 1931-1932, vol. 2, p. 246-284.

  48. José María de Cossío, Los toros en la poesía castellana, tomo I, Estudio y tomo II, Antología poética, Madrid, Compañía Ibero-Americana de Publicaciones, 1931, y la edición de Obras escogidas de Salvador Jacinto Polo de Medina, Madrid (Clásicos Olvidados, x), 1931.

  49. Ángel Zorita, ob.cit., 1976, p. 52-53, indica 1933 como año de la construcción de su casa en Chamartín de la Rosa.

  50. Por la carta posterior se infiere que Cossío le contestaría que las correcciones las hacían los encargados del Boletín de la Biblioteca de Menéndez Pelayo.

  51. «En verso» sobreescrito.

  52. «Traductores o imitadores de la fábula» añadido.

  53. La carta refleja la importancia de Cossío como investigador del gongorismo, lo que se aprecia en un proyecto gestado en estos años pero publicado mucho más tarde, las Fábulas mitológicas de España, Madrid, Espasa-Calpe, 1952. Se trata de una obra muy compleja y extraordinariamente meritoria que reivindica la raigambre castellana de la fábula mitológica, poco o nada tratada hasta entonces por los investigadores. Como no podía ser de otra forma, las Fábulas comienzan con un prólogo de Dámaso Alonso que lleva por título «Primavera del mito»: «Abre por la primera página y, lentamente, vete impregnando hasta la última: tienes entre tus manos el mejor libro de Cossío (que tantos y tan buenos ha escrito ya), un libro en el que se han juntado máximo conocimiento y sensibilidad máxima, una de las obras maestras de la crítica moderna española».

  54. Como se ve a continuación, se trata de una ironía: «Gerardo se está portando [mal] conmigo».

  55. Confuso en el original.

  56. Pero posterior a la publicación del homenaje a Artigas.

  57. «También había querido unas tiradas aparte: ¿sabes si las han hecho?» subrayado en rojo, no por Alonso sino quizá por Cossío.

  58. Cossío publicó en el número de diciembre de 1935 de Cruz y Raya «Un ejemplo de vitalidad poética, la Fábula de Genil de Pedro de Espinosa». Ese mismo año la revista de Bergamín publicó en su colección «La rosa blanca», al cuidado de Concha Méndez y Manuel Altolaguirre, la Fábula, con nota introductoria de Cossío.

  59. El poeta y capitán Francisco de Aldana (c. 1540-1578).

  60. Es un papel tamaño cuartilla.

  61. María Galvarriato García (fallecida en 1993), colaboradora del Centro de Estudios Históricos y de revistas como Archivos de Literatura Contemporánea, dirigió hasta su jubilación la biblioteca de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Complutense (1941-1971).

  62. Enrique Sánchez Reyes (1887-1987), director de la biblioteca de Menéndez Pelayo, tras la titularidad de Miguel Artigas y el breve periodo de interinidad del propio Cossío.

  63. Se refiere al Real Racing Club de Santander: Cossío fue su presidente entre 1933 y 1936.

  64. Raúl Gómez Samperio, uno de los mejores conocedores de la historia del Racing, desconoce a qué se refiere Alonso con esa supuesta agresión o intento de agresión. El entrenador del equipo era por entonces el inglés Robert Firth que, aunque cuajó una buena campaña con el Racing, lo abandonó porque no aguantaba que algunos directivos interfirieran en las alineaciones. No parece que Cossío se entrometiera en asuntos técnicos. En el acta de la junta del 30 de diciembre de 1931, sin embargo, consta que se encargó a Cossío, entonces vicepresidente, la redacción de una nota desmintiendo las injerencias de los directivos y añadiendo que en cualquier momento el criterio de respetar las decisiones técnicas del entrenador podrían variarse. Firth se marchó a entrenar al Real Madrid en mayo de 1932 y fue sustituido por Pagaza, que entrenó al Racing en la temporada 1932-33; luego se fichó a otro entrenador británico, Randolph Galloway. Según Gómez Samperio, a quien agradezco su información, si la agresión se hubiera producido se hubiera sancionado al entrenador y desde luego se hubiera hecho constar en el acta de las juntas.

  65. «Las oposiciones de marras empiezan enseguida: el día 27 creo», añadido a lápiz.

  66. Pocas semanas antes de participar en la Magdalena de Santander en las actividades de la Universidad Internacional. Ese verano, Alonso impartió una serie de diez conferencias en el Curso para Extranjeros de la recién creada Universidad Internacional de Verano en Santander, sobre «Aspectos gramaticales de la lengua española, especialmente importantes para estudiantes extranjeros», así como diez lecciones prácticas sobre «Comentario gramatical de textos selectos». Protagonizó, además, un «seminario extraoficial» a petición de sus alumnos, en el que trató sobre la poesía de Salinas, Guillén, Alberti, Lorca, Altolaguirre y Aleixandre.

  67. A pesar de la negativa a publicar este texto que le había enviado a Alonso, Cossío publicó varios artículos en la Revista de Filología Española, que dirigía Ramón Menéndez Pidal: «La fecha de Amar, servir y esperar, de Lope de Vega», xii, cuad. 1.º (enero-marzo 1925), p. 70-72; «La patria de Micaela Luján», xv, cuad. 4.º (octubre-diciembre 1928), p. 379-381; «Sobre la transmisión del tema de Hero y Leandro», xvi, cuad. 2.º (abril-junio 1929), p. 174-175; «Sobre Fray Ambrosio Montesino», xviii, cuad. 1.º (enero-marzo 1931), p. 38-39; «Una carta de Lope de Vega», xviii, cuad. 2.º (abril-junio 1931), p. 164; «Sobre las fuentes de la leyenda de Zorrilla A buen juez, mejor testigo», xviii, cuad. 3.º (julio-septiembre 1931), p. 260-261; «De bibliografía gongorina», xix, cuad. 1.º (enero-marzo 1932), p. 64-65; «De Ausias March y Bartolomé Argensola», xix, cuad. 2.º (abril-junio 1932), p. 187-188; «El modelo estrófico de los Layes, decires y canciones de Rubén Darío», xix, cuad. 3.º (julio-septiembre 1932), p. 283-287; «El mote “sin mí, sin vos y sin Dios” glosado por Lope de Vega», xx, cuad. 4.º (octubre-diciembre 1933), p. 397-400; «Las continuaciones del Lazarillo de Tormes», v (1941), p. 514-522.

  68. En abril de 1933. Más adelante, en esta misma carta, menciona los días 19 o 20 de abril. Cuenta Alonso en «Notas sobre Fray Luis de León y la poesía renacentista», Ensayos sobre poesía española, Madrid, Revista de Occidente, 1944, p. 151, nota 1, un tragicómico pormenor de la gestación de este artículo, básicamente el ejercicio que preparó para esas oposiciones a la cátedra de Valencia, cuyo presidente fue Unamuno: «Faltaba sólo una hora para terminarse el tiempo concedido, cuando se abrió la puerta del “encierro” y entró don Miguel. Se sentó a mi lado y comenzó a hablar con su agilidad, con su ingenio de siempre. Y siempre le oí con veneración, mas aquel día yo miraba al reloj, pidiéndole a Dios que mi interlocutor se marchara. Pero, ¿cómo decírselo a don Miguel, si era precisamente el presidente de mi tribunal? Se fue, por fin, cuando me quedaban pocos minutos. Rematé como pude. Era esto en abril de 1933». En la entrevista de Manuel Vicent, «Dámaso Alonso: en el jardín de la filología», El País, 1 agosto 1981, Alonso indicó: «Recuerdo que Unamuno fue el presidente del tribunal de oposiciones cuando yo gané la cátedra. Después de terminar cada ejercicio me decía: “Qué, ¿damos un paseo”. Y me sometía a unas caminatas terribles, a unas palizas moradas. Me arrinconaba contra una pared y me hablaba en francés. Yo estaba muy preocupado».

  69. Según Ángel Zorita, ob.cit., 1976, p. 51, Alonso se hubiera quedado en Oxford de no haber sacado las oposiciones.

  70. José Fernández Montesinos (1897-1972), colaborador del Centro de Estudios Históricos.

  71. Debe de referirse a la Revista de la Biblioteca, Archivo y Museo, dirigida por Manuel Machado.

  72. Se refiere a la «nueva» Cruz y Raya porque la revista que dirigía José Bergamín acababa de aparecer en abril de 1933. En Cruz y Raya Cossío publicó posteriormente los siguientes artículos: «Anecdotario incompleto de Don Luis de Góngora», 5 (agosto 1933), p. 53-73; «Pedro de Jesús», 7 (octubre 1933), p. 104-129; «De tal palo tal astilla. Origen y polémica de la novela de Pereda», 12 (marzo 1934), p. 8-31; «Francisco de Aldana, el Divino», 13 (abril 1934), p. 113-138; «Los sonetos amorosos de Camoens», 19 (octubre 1934), p. 43-76; «Racionalismo del arte dramático de Calderón», 21 (diciembre 1934), p. 38-75; «Imperio y milicia», 22 (enero 1935), p. 69-97; «Un ejemplo de vitalidad poética, de Genil de Pedro de Espinosa» (diciembre 1935), p. 43-66.

  73. Alfonso Reyes trabajó en el Centro de Estudios Históricos y, en efecto, anotó El peregrino en su patria, de Lope de Vega, como indica Paule Anne Patout, «Teófilo Gautier y Alfonso Reyes, prosista y poeta», en Carlos H. Magis (coord.), Actas del Tercer Congreso Internacional de Hispanistas, El Colegio de México, 1970, p. 681. El texto sobre la obra de Lope se ha publicado en las revistas Universidad de México (enero de 1932) y Boletín de la Real Academia Argentina de Letras (v, 1937, p. 643-650), además de en Obras Completas de Alfonso Reyes, vi, Capítulos de literatura española, México, Fondo de Cultura Económica, 1957, p. 68-73. Reyes quiso publicar la edición de El peregrino en su patria en la casa Thomas Nelson and Sons, Ltd., Edimburgo, pero el libro no me consta que apareciera.

  74. Colección «Clásicos Castellanos».

  75. Dirigida a las Oficinas de Espasa-Calpe, calle Ríos Rosas, Madrid.

  76. Por la referencia que se hace en la carta a un libro publicado en 1943.

  77. Esta traducción se publicó en 1943. Durante la posguerra, la posición de influencia editorial de Cossío, a través de la asesoría de la colección Austral, había crecido notablemente.

  78. Alonso Zamora Vicente (1916-2006) fue catedrático de la Universidad de Santiago entre 1943 y 1946.

  79. La edición de Francisco de la Torre aparecería en «Clásicos Castellanos», de Espasa Calpe, en 1944.

  80. La amistad se había iniciado en los años treinta, en el Centro de Estudios Históricos.

  81. En el Archivo de la Casona de Tudanca se conservan siete cartas de Alonso Zamora Vicente, la primera de las cuales lleva fecha de 25 de marzo de 1946.

  82. «mi» como determinante posesivo, no como pronombre «mí».

  83. Hijos de la ira, cuya primera edición salió en 1944 en Revista de Occidente, apareció en Austral en 1946 (Buenos Aires, Espasa Calpe), con cinco poemas añadidos. Sorprendentemente, esta edición de Austral no aparece mencionada en el repertorio bibliográfico sobre Alonso que ofrece el departamento de Bibliotecas y Documentación del Instituto Cervantes (http://www.cervantes.es/imagenes/File/biblioteca/bibliografias/alonso_damaso.pdf (consultado el 1 de mayo de 2013), que sin embargo recoge otras ediciones posteriores. En su artículo «La forma poética», publicado en Arriba, sobre Hijos de la ira, de Alonso, y Sombra del paraíso, de Aleixandre, Cossío manifestaba algunos reparos referidos a las nuevas formas líricas: «Ya sé yo que el ritmo acentual, el número silábico y la rima sobre todo, no han sido siempre factores del preciso artificio de la expresión poética; pero entre nosotros los pueblos occidentales tienen una tradición milenaria».

  84. Gonzalo Suárez Gómez era catedrático de francés, depurado tras la guerra por su compromiso político socialista. Es el padre del escritor y cineasta Gonzalo Suárez Morilla.

  85. El 4 de diciembre de 1947 Cossío fue elegido académico de la RAE. En realidad, Alonso había sido elegido antes que Cossío. Alonso ingresó el 25 de enero de 1948 con el discurso titulado «Vida de D. Francisco de Medrano», al que contestó Emilio García Gómez. Cossío, por su parte, ingresó el 6 de junio de 1948 con el discurso «Lope como personaje de sus comedias», al que también contestó García Gómez. Con estos términos escribía Salinas a Guillén desde Baltimore, el 11 de marzo de 1948, en Pedro Salinas / Jorge Guillén. Correspondencia (1923-1951), edición, introducción y notas de Andrés Soria Olmedo, Barcelona, Tusquets (Marginales, 120), 1992, p. 439: «José María haciendo que los amigos, por suscripción, le regalen el uniforme de académico».

  86. Eusebio Oliver.

  87. Emilio García Gómez.

  88. «Marmitonado» no figura en el DRAE.

  89. «¿Cuándo entras en la Academia? Hoy le pongo un telegrama a Gerardísimo», añadido en un lateral.

  90. El 22 de octubre de 1948, el día de su 50.º cumpleaños, Alonso le escribe en el reverso de una tarjeta de nuevo socio de Manizales, presentado en la misma fecha por Gustavo Larrea.

  91. Fermín Espinosa, Armillita.

  92. Envía el cartel.

  93. Seguramente se refiera al tercer volumen publicado de Los toros.

  94. En el margen, «Historia / de la / Literatura Española / por / José M.ª de Cossío / y / Dámaso Alonso».

  95. En 1961 se celebró el cuarto centenario del nacimiento de Luis de Góngora, poeta al que Cossío y Alonso habían reivindicado desde los años veinte. Además del homenaje de la Revista de Filología Española, la RAE celebró una sesión especial el 10 de diciembre de ese año, con intervención de tres de los académicos que habían protagonizado los actos del 27: Alonso disertó sobre aspectos biográficos del autor de Soledades, Gerardo Diego se imaginó al poeta en la propia Academia, y Cossío comparó uno y otro centenarios, destacando que en el del 27 se airearon los inconvenientes y problemas de Góngora, mientras que a la altura de 1961 no cabía ya ninguna duda sobre la grandeza del poeta.

  96. El fallo del premio Mariano de Cavia de 1964 se publicó en ABC, 7 de abril de 1964: ganó Juan Luis Calleja con el artículo «Carta a un portugués», publicado en ABC el 17 de septiembre de 1963. En el jurado estaban José María Pemán, Manuel Halcón, Xabier de Echarri, Manuel Jiménez Quílez y José María de Cossío. A lo largo de todo el historial del premio, instituido en 1920, no figura Dionisio Gamallo Fierros como ganador.

  97. «Te» aparece corregido a bolígrafo, sobre el «le» de la carta-tipo.

  98. En estos años Alonso no impartió ninguna conferencia en el Ateneo, según el registro del libro Ateneo de Madrid. Memoria 1962-1967, Madrid, Dirección General de Cultura Popular y Espectáculos, 1968. Cossío fue presidente de la entidad entre 1962 y 1971.

  99. Manuel García Blanco (1902-1966), discípulo de Unamuno. El trabajo que preparó Dámaso Alonso fue «Manuel García Blanco y la obra de Unamuno», Cuadernos de la Cátedra Miguel de Unamuno, xvi-xvii (1966).

  100. Alberto Sánchez (1915-2003) publicó en Espasa Calpe una edición de El patrañuelo (Madrid, 1982). Se ha publicado la correspondencia cervantina de este filólogo: José Carlos de Torres, «Correspondencia cervantina de D. Alberto Sánchez», Anales cervantinos, xlii (2010), p. 277-304 y xliii (2011), p. 245-269.